Libro impreso o libro electrónico ¿cuál es mejor?
Con el avance de la tecnología se han modificado muchos de los hábitos del día a día y la lectura no ha sido la excepción. Con el tiempo ha surgido el debate sobre los libros impresos o libro electrónico comúnmente llamados ebooks, pero luego de muchos años los libros físicos y las impresiones en tabloide siguen aún muy vigentes y por muchas buenas razones. ¿Cuál versión prefieres tu?
Los libros impresos siguen teniendo un valor simbólico muy alto y a medida que surgen más alternativas como el libro electrónico, el impreso se reafirma como un objeto que está elaborado para conservarse, que ha pasado por un proceso más largo y cuidado en su producción. Para muchas personas tener un libro impreso es poseer una lectura importante y que desean mantener con ellos en sus hogares.
En cambio, el libro electrónico tiene que ver con la conveniencia, la facilidad de tener muchas obras o textos en un dispositivo móvil, menos ocupación de espacio, poder leer lo que deseen en cualquier lugar y, en algunos casos, conseguir precios más bajos.
También hay otros motivos a tomar en cuenta, los cuales tienen que ver en cómo estos formatos afectan nuestra capacidad para leer y comprender. Revisemos más a continuación.
El libro impreso y libro electrónico: ¿cómo influyen en la lectura?
El libro impreso mejora la concentración y el disfrute de la lectura porque involucra muchos sentidos, el olor del libro, la textura y el sonido de las hojas al pasar. Todo eso ayuda a crear una experiencia agradable. Adicionalmente, un libro impreso puede tener muchos detalles, aunque imperceptibles están hechos para que el lector se sienta a gusto, por ejemplo, el color del papel, su peso, la forma y disposición de las letras.
Es cierto que, los dispositivos para leer un libro electrónico han logrado muchos avances en cuanto a editar la disposición del texto y la iluminación para evitar el cansancio en los ojos. Con esto permiten que sea más cómodo leer por más tiempo, en especial para las personas que tienen algún defecto visual y personas mayores. Sin embargo, se ha comprobado que la mayoría disfruta más el impreso que un libro electrónico.
Un libro físico puede ser una obra estética, al incluir imágenes de colores vibrantes y diseños únicos que se consiguen gracias a impresiones en alta resolución y de calidad. Asimismo, tener una mejor función de aprendizaje facilitando que el cerebro haga conexiones a través de actividades que incluyen la intervención con el libro.
El libro electrónico es conveniente y práctico, pero en algunos casos puede perder la calidad de un libro bien impreso. Cualquier texto almacenado en un formato de lectura puede considerarse un libro, sin la necesidad de pasar por la revisión meticulosa que lleva a una edición.
¿A dónde nos lleva el futuro?
La llegada del libro electrónico no ha significado la muerte del libro impreso, en todo caso ha servido para revalorizar y seguir mostrando su relevancia en una época donde el desarrollo digital es innegable.
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